Chicas malas, o más conocida como Mean Girls es una película que narra la historia de Cady Heron (Lindsay Lohan) una recién llegada al instituto que tratará de adaptarse a su nueva vida. Como todo instituto americano que se precie, nos encontramos a tres grupos: las populares, los deportistas y los raritos. Cady se junta con los raritos, como es normal, ella todavía no es nadie. Los raritos Janis (Lizzy Caplan) y Damian (Daniel Franzese), junto a Cady, despedazan a Regina(Rachel McAdams) llamándola calienta braguetas, ninfómana, putón y un largo etcétera. Cady también se refiere a Regina como a “la barbie que nunca tuvo”.
Más allá de lo terrorífico que me parezca este comportamiento entre mujeres y que se vea como algo normal, el final nos guardará una sorpresa. Al menos, no es una película vacía del todo. En un momento mencionan que Cady no puede liarse con el ex de Regina porque es “la gran regla del feminismo“. Durante gran parte de la película se insultan, se despedazan, se llaman de todo y ahora mencionan el feminismo.
Y eso no es todo, también tienen un libro en el que ponen verde a todo cristo. El libro de la discordia que más tarde incendiará el instituto. En ese libro hay etiquetas para todo el mundo, no se privan de nada. Además, utilizan el término lesbiana como insulto y en ningún momento dejan de utilizarlo así, es más, todo el rato se intentan justificar (de manera indirecta) de que Janis no lo es. Otro de los temas que se abordan en la película es el interés romántico. A Cady de gusta Aaron, el exnovio de Regina y además, como quiere vengarse de ella hace todo lo posible para liarse con él. Por ello, Cady es muy buena en matemáticas y se hace la tonta para poder quedar con Aaron. Por lo tanto, lo que nos enseña la película de esto es que no puedes ser lista y gustarle a un chico, es algo incompatible. Si el hombre no se siente superior de alguna forma a ti, y puede enseñarte algo, no le interesas.
Sin embargo, al final de la película los profesores hacen que todas las chicas se pidan disculpas. También es curioso que solo sean las mujeres las que tienen que disculparse, como si los hombres no estuvieran ahí y no hubieran hecho nada. Pero este último aspecto lo puedo entender por el nombre de la película. Al fin y al cabo es una película típica que está llena de tópicos. Nos vemos.
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